14 ene 2009

El bajo Brujo...

En una noche de rock un Bajo Brujo conocí,
él danzaba entre cada acorde,
sobre su escoba verde, toda la noche.

No usaba sombrero ni sabía de magia negra,
el Bajo Brujo era un enamorado cualquiera,
pero no con esto igual quiero decir que los demás,
sino un tipo especial y sincero,
de corazón blando y mente fiera.

Siempre soñando al tiempo que su boca
grita cada frase de la canción en turno.
El Bajo Brujo, hechizado está
porque bebió un par de cervezas.

Y me llama, así, de repente,
como un fantasma que algo quiere,
y me dice hermano, y escucho como llora su mano
cuando recuerda la piel de su amada,
de aquella dama gris por la que bebe
y vuela en busca de posada....

Una tarde, recuerdo, viernes,
me llamó alterado pidiendo letras
para elaborar un hechizo que le hiciera
volver con ella... Pero fue, al parecer absurdo,
el diablo se nos había adelantado.

Rito sagrado para comenzar
deseando que ella volviera,
el Bajo Brujo estuvo toda la noche
mirando la puerta,
pero se cansó de esperar y cerró
los ojos, recuerdo, en aquel momento
el silencio le hizo llorar...

Desde entonces a ahora,
el Bajo Brujo busca y no encuentra descanso,
ni en la su magia abstracta,
ni en los ritos etilicos.
Él está cansado,
pero he visto que nunca dejará de volar
por el manto estelar,
con su escoba verde y una cerveza
que la mano triste ha de consolar,
buscando estar a su lado,
ideando la manera de vencer al diablo,
queriendo de una vez por todas
dejar el silencio y llorar, pero no de nostalgia,
claro que no, el Bajo Brujo es fuerte,
y si derrama una lágrima, sé...
Será de felicidad...

1 comentario:

Nycher dijo...

Ese brujo es un brujo bohemio y un brujo incompleto, pues no existe cuento en donde sin su escoba, se le pueda llamar Brujo.
Entre tu y ese Bajo Brujo me van a hacer llorar...